¿Chris Pratt interpretando a un héroe anclado en los 80, junto a un equipo dispar de compañeros, incluyendo a un pequeño cómplice lleno de ocurrencias, y todo bajo la dirección de los hermanos Russo? Te resultará familiar, pero no, no estamos hablando de su etapa como Star-Lord en el Universo Marvel. Pratt ahora es Keats, un veterano de guerra y contrabandista en la comedia de acción de Netflix, The Electric State. Basada en la popular novela gráfica de Simon Stålenhag, es ahora cuando el actor se ha percatado de lo parecido que es su nuevo personaje a su papel en Guardianes de la Galaxia. ¿Coincidencia o destino? ¡Sigue leyendo y decide por ti mismo!

«Keats y Quill son como dos caras de la misma moneda de la nostalgia», dice Pratt con una sonrisa. ¿Recuerdas los 90? Electric State nos lleva de vuelta, al igual que Keats, con sus aires alternativos. Y, claro, no podemos olvidar a Quill, nuestro héroe de los 80, con sus referencias a la cultura pop que se convirtieron en su escudo y espada antes de decir adiós a la Tierra a los tiernos 13 años. Ambos son hijos de su tiempo, cada uno a su manera. ¿No es fascinante cómo la música puede definirnos?

¡Bienvenidos a la aventura cibernética de los 90, ‘The Electric State’! Nuestra querida Millie Bobby Brown encarna a Michelle, una adolescente valiente y huérfana, que se encuentra en el corazón de un mundo posguerra después de una rebelión robótica fallida. ¿Suena emocionante, verdad? Michelle se cruza con Keats, un contrabandista interpretado por nada menos que Chris Pratt, y su inseparable amigo robot Herman (¿ya mencionamos que tiene la voz de Anthony Mackie?). Juntos, recorren el suroeste de Estados Unidos en busca del hermano perdido de Michelle. ¿Y adivina qué? A lo largo del camino, se unen a robots rebeldes para salvar al mundo, muy al estilo de Peter Quill y sus Guardianes. ¡Prepárate para un viaje lleno de emoción y nostalgia!

Chris Pratt nos da un vistazo detrás de escena a sus dos personajes, y no puedes evitar notar las similitudes. «Ambos están en una aventura, luchando por algo más grande que ellos mismos, dispuestos incluso a sacrificarse», nos dice con entusiasmo. ¿No te suena a una charla de café con un amigo? Y eso no es todo. «A lo largo de la película, lo ves interactuando con un personaje animado», agrega. ¿Te imaginas a Peter Quill en una guerra de robots y huyendo con su amigo robot en lugar de ser abducido al espacio? Así es como Chris ve a sus personajes al desnudo.

Pero Pratt aclara rápidamente que The Electric State «se siente como una película completamente diferente» a sus anteriores películas del MCU. «Es casi como un neowestern: viajamos por el suroeste y emprendemos este viaje para encontrar al hermano de Michelle», añade. «Creo que [Keats] es menos competente que Star-Lord. Creo que es un poco más inepto, un poco más bobo, y se ve diferente, con el pelo y el bigote».

El actor se ríe mientras compara The Electric State con su propio «¿Qué pasaría si?» para Star-Lord. «Sí, es cierto», confiesa. «Es como si todos los personajes que interpreto se unieran en una gran celebración de ciencia ficción, familiar, ruidosa y aventurera. Es como si este tono comercial me permitiera explorar una versión alternativa de los personajes que amo interpretar».

Volver a trabajar con los hermanos Russo, quienes lo dirigieron en las películas de Avengers, hizo que The Electric State se sintiera aún más familiar. «Trabajar con ellos es casi lo mismo que trabajar en una película de Marvel: grandes presupuestos, escenarios impresionantes, mucha pantalla verde y muchos elementos animados», explica. «Y el mismo ambiente familiar con gran parte del equipo de nuestros trabajos anteriores: el departamento de publicidad, el departamento de cámaras, los guionistas. Fue como volver a casa. Fue realmente cool».

Eso también permitió a Pratt llevar su improvisación a otro nivel durante el rodaje. «Me encontré improvisando mucho; los Russo son muy abiertos a eso», revela. «Lo alientan, lo cual es genial. Ha sido así desde que trabajé con ellos en Avengers y luego en esta película. Hay un momento del que estoy especialmente orgulloso; no quiero arruinarlo, pero es al final de la película, y es una improvisación que se incluyó en la película, de la que estoy muy orgulloso».

The Electric State ya está disponible en Netflix. ¿Listos para la aventura?