¡Hey chicos! Anthony Ramos, el galán de Hamilton, acaba de soltar una bomba que nos dejó con el ojo cuadrado. Resulta que durante una función del musical en 2015, nada más y nada menos que Madonna estaba en el público, pero en lugar de estar al tiro con la obra musical, ¡la reina del pop estaba clavadísima en su iPad! Sí, así como lo oyes, la neta es que no le bajó de intensidad ni un segundo.

Sin pelos en la lengua, Anthony, de 33 años, contó que ver a Madonna con la cara metida en su tablet fue lo más “intenso” que le tocó vivir en el escenario. “Estaba así todo el tiempo”, dijo, haciendo la mímica de alguien que no suelta la pantalla ni por error. Y remató con un: “Órale, si no te está gustando tanto, ahí está la puerta, ¡no te quedes nomás por compromiso!”. ¡Zas, qué quemón!

No es la primera vez que la reina del pop se pone en plan distracción total. En 2015, Jonathan Groff, otro crack de Hamilton, también la llamó out por estar pegada a su iPhone, iluminando el teatro como si fuera antorcha. Hasta Lin-Manuel Miranda, le puso un estate quieto y no la dejó pasar al backstage por andar texteando en el Acto 2. ¡Qué oso!

La neta, esta anécdota nos recuerda que hasta las leyendas como Madonna pueden meter la pata en el teatro. Ramos, quien la rompió como John Laurens y Philip Hamilton, sigue siendo un ídolo que no se anda con rodeos. Ahora, mientras brilla en pelis como Twisters y se alista para Bob the Builder (sí, en serio), nos deja claro que en el escenario no se anda con juegos. ¿Y Madonna? Bueno, parece que prefiere el brillo de su iPad al de las luces de Broadway. ¿Qué opinan, banda? ¿Le damos un pase o fue demasiado?