Ok, literal, si todavía no estás hablando de Aldo de Nigris es porque vives debajo de una piedra. El regio entró a La Casa de los Famosos México y desde el día uno se volvió el crush nacional. Y no, no es solo por el apellido que trae, sino porque el chavo tiene todo el vibe para ser el favorito del fandom.

Aldo es de Monterrey, nació en 1999 y aunque viene de una familia súper famosa, se nota que lo suyo ha sido armar su propio rollo. Le metió al fútbol en fuerzas básicas, luego realitys, después contenido digital y hasta podcast. O sea, no es de esos que se quedan esperando la fama por herencia, él se ha rifado para estar donde está.

En la casa, el chico de oro brilla porque es mega auténtico. Te canta, te baila, te suelta confesiones bien deep sobre su familia y de pronto te tira un comentario random y chistoso que termina viral en TikTok. Esa mezcla de carisma, vulnerabilidad y flow lo tiene convertido en el consentido de miles.

Lo más top es que Aldo no anda con poses. El mismo contó que antes tuvo que trabajar vendiendo sartenes para salir adelante, así que cuando dice que quiere usar el premio para apoyar a su mamá, todos lo creemos. Ese detalle de ser agradecido y sencillo es lo que termina de hacerlo irresistible.

Hoy se habla de Aldo como el chico de oro porque tiene todo: la historia de esfuerzo, la conexión real con la gente y el charm que te hace querer seguirlo en todas. Y obvio, con este glow up que está teniendo, lo que viene para él pinta mega promising.